miércoles, 24 de octubre de 2012

Un baño en el Logone


El río Logone es uno de esos grandes ríos africanos que no se sabe en donde nacen, y que se une al río Chari cerca de Yamena la capital del Chad, para desembocar luego en el lago Chad. Tiene una longitud de unos mil kilómetros, y hace de frontera entre el Chad y el Camerún.
Los Massás que viven a su  orilla se dedican a la pesca, además de ser agricultores y ganaderos. Entre las diversas especies de peces que allí capturan se encuentra el famoso "capitán", de carne blanca y que algunos ejemplares pueden llegar hasta los cien kilos de peso, y que es vendido en la capital e incluso se exporta a Francia y se come en los mejores hoteles de París conocido como "le prince du Chari".
Al final de la estación seca cuando la temperatura llega hasta los 48º es un placer darse un baño en el río, aunque no haya playa de arena, sino barro y se corra un cierto peligro, tanto por el descenso de las aguas, como sobre todo por los hipopótamos que allí habitan.
La misión de Gobó está a unos 25 kilómetros del río Logone, a media hora en coche, por lo que algún domingo por la tarde después de pasar el bochorno del día, me fui a dar un merecido baño en sus aguas.

martes, 9 de octubre de 2012

Pescando con nasas

Los Guiseys, como los Masás del Norte del Camerún, son esencialmente agricultores y ganaderos, viven de los campos de mijo y sorgo, y del ganado: vacas, ovejas y cabras, pero también se dedican a la pesca en el lago de Fianga, con lo que pueden completar su alimentación. A pesar de los hipopótamos que allí abundan, los pescadores con sus canoas saben por donde ir y lanzar las redes y no molestar ni acercarse a los hipopótamos que son muy peligrosos. Una vez, estando yo allí, acudió al dispensario un hombre que había sido atacado por un hipopótamo con una dentellada en la pierna y que se salvó milagrosamente. También las mujeres y niños acuden a la orilla del lago a pescar, algunos con caña y anzuelo y lo más normal con las nasas, como vemos en esta fotografía. Las nasas son una especie de cestos hechos con los juncos de la orilla del lago, de forma cónica, con una boca ancha y que se va estrechando hacia la parte alta del cono, y que se arrastra dentro del agua para capturar a los peces en su interior. Vemos que también llevan una calabaza atada a la cintura que les ayudará como flotador para nadar.