miércoles, 28 de diciembre de 2011

La bola de mijo

El mijo es el alimento básico para la mayor parte de la población del norte de Camerún, y para otros países de la región de África central, juntamente con otros cereales como el sorgo o el maíz, y últimamente también el arroz.
Entre los Masás y Museys con los que viví, era el pan nuestro de cada día.
La bola de mijo que amasaban y cocían las mujeres, como ya he descrito anteriormente en el capítulo anterior "moliendo mijo", era servida en un plato o cuenco a la que se acompañaba con otro cuenco de salsa. Los comensales sentados en esteras, alguna vez sillas y lo normal en el mismo suelo, cogían con los dedos una porción de la bola de mijo, la amasaban entre los dedos y hacían un pequeño hueco  que servía de especie de cuchara para mojarla en la salsa y llevarla a la boca.
La comida principal del día era al anochecer, cuando los hombres habían regresado de sus tareas del campo, de atender el ganado o de la caza, y las mujeres habían preparado la comida después de haber molido el mijo, y un sinfín de tareas domésticas. Lo que sobraba de la cena quedaba para el día siguiente por la mañana, pero esto ya se tomaba frío, a no ser que se diluyera como una papilla tomándolo con leche.
El mijo era el único alimento. Lo que variaba era la salsa, que podía ser de gombo, verduras, pescado seco, cacahuetes, y más raramente de carne.
Antes de comer te ponían una palangana con agua para lavarte las manos, y lo mismo al terminar la comida, pues no se utilizaba cubiertos. Además varias personas tomaban la bola de mijo del mismo plato y la untaban en el mismo cuenco de salsa.
Al terminar había que eructar como signo de educación de que uno había quedado satisfecho con la comida.

lunes, 12 de diciembre de 2011

Moliendo mijo

Una de las tareas diarias de la mujer en África además de cuidar de los hijos, ir al pozo a buscar el agua, limpieza de la casa, trabajos en el campo, atender los animales de corral y muchas cosas más, es la de preparar la comida.
Siendo el mijo y el sorgo la base de la alimentación, todos los días tiene que dedicar una buena parte de su tiempo a preparar la comida.
Primero tiene que trepar a lo alto del granero para coger los granos necesarios para la alimentación de todo el día. Luego poniendo los granos en el mortero de madera majarlo con el majadero al ritmo de una canción, y muchas veces con el niño pequeño a sus espaldas. Una vez machacado el grano en el mortero y separada la cáscara del núcleo, tiene que aventarlo con la ayuda de dos calabazas. Si hace viento el grano aventado cae de la calabaza superior a la inferior que lleva en cada una de las manos, y la cáscara decorticada se la lleva el viento. Si no hay viento, recurre a hacer la misma operación pero andando de un sitio para otro para que la cascarilla quede atrás y se separe del grano.
Luego hay que triturar el grano en el molino, como vemos en la fotografía de esta joven.
El molino consiste en dos piedras planas, una mayor y fija que está incrustada en el tronco de madera o molino y otra más pequeña para las manos, y en medio se pone el grano que es triturado en un movimiento continuo de atrás hacia adelante acompasado por canciones de la misma mujer. Así se obtiene la harina de mijo que una vez cernida y limpia servirá para hacer la masa o bola de mijo.