viernes, 18 de enero de 2013
¡Por fin la bomba!
Cuando comenzó la estación de lluvias en 1977 ya teníamos la nueva bomba de agua instalada sobre el pozo nuevo que hicimos en la misión de Gobó, y que por fin nos solucionaría el problema del agua para la misión; tanto para las casas de las religiosas y misioneros como sobre todo para el hospital. No era una bomba eléctrica pues no teníamos electricidad en Gobó, sino manual y necesitaba del trabajo de un hombre para poder sacar el agua del pozo y subirla al nuevo depósito de 2000 litros, que tuvimos que construir, y desde allí llevar el agua canalizada al hospital y casas de la misión. Era un gran avance en relación a lo que teníamos antes, que teníamos que sacar el agua del pozo a base de cubos, y además un pozo poco profundo que no manaba suficiente agua en la estación seca, con los problemas que ello acarreaba para la misión y sobre todo para el hospital. A partir de entonces no volvimos a quedarnos sin agua en el pozo y por consiguiente siempre estuvo abastecido de agua el hospital y la misión. La bomba de agua y la construcción del nuevo pozo lo pudimos realizar gracias a la generosidad de los cristianos de Canadá.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario